Atenea

Es una preciosa ovejita adulta, muy simpática y con unos ojos que te transportan a otro mundo de armonía, paz y equilibrio. Apareció perdida en el monte y a través de una persona con un corazón enorme llegó a nuestro hogar. Estaba embarazada aunque nosotros no lo sabíamos y a los cuatro meses de llegar aquí dio a luz a la bellísima Cocoa. Ellas se pasan todo el tiempo juntas y son la demostración más clara de que un vínculo entre una madre y su hija o hijo nunca debe romperse, independientemente de la especie a la que pertenezcan. Se ha convertido en la mamá y la guía de todas las ovejas que han llegado posteriormente al santuario.